La AEAT está revisando las deducciones por vivienda habitual
basándose en el bajo consumo de los suministros.
Según las estadísticas de
consumo que tienen las compañías de
energía, estar por debajo de la media puede convertirnos en el candidato
perfecto para quitarnos la desgravación.
El problema surge cuando una
persona está todo el día fuera por motivos laborales y sólo consume un mínimo
por los electrodomésticos que no se
pueden apagar; es normal que en este caso, se esté por debajo de la media.
Pues ya están realizando inspecciones de contribuyentes que están bajo estas circunstancias, y les está
siendo difícil demostrarlo, incluso a algunos le han quitado dicha “deducción” (la
cual ha desaparecido para aquellas personas que hayan comprado su vivienda
habitual a partir del 01/01/2013)
A partir de ahora el simple Certificado de Empadronamiento,
por sí solo, no va a servir. Están siendo muy estrictos: habrá que aportar
también, facturas de luz, agua, gas, contrato laboral, y cuantos documentos se tengan
para demostrar que, por motivos de trabajo, únicamente se usa la vivienda para
dormir.
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